No se olvida...

Estimados lectores, espero tengan un buen inicio de semana en la cual, esperemos, siga igual de nublada y fresca como hasta ahora ha transcurrido..no se crean, ya salió el sol, a morirse de calor se ha dicho, en la madre.

Ayer se conmemoró un aniversario más del "Jueves de Corpus", es decir, la matanza de estudiantes que se llevó a cabo el 10 de Junio de 1971 y que a la fecha, como muchas cosas en nuestro sagrado país, no cuentan con un responsable pagando por ello. Hablar del tema de la guerra sucia llevada a cabo por el gobierno en contra de grupos subversivos es complicado (mucho más para un incauto que no se sabe expresar, como yo). Los que más destacaron fueron la guerrilla del profesor Lucio Cabañas en el estado de Guerrero y la Liga Comunista 23 de Septiembre en el norte y centro del país. Si bien es cierto que dichos grupos subversivos actuaron en contra de la ley en la mayoría de las ocasiones, también es cierto que la misma autoridad actuó en contra de la ley, la única diferencia que hubo en dicha guerra sucia fue que a los miembros de la autoridad no los aventaban de helicópteros hacia el mar, ni eran violados, torturados física y mentalmente, asesinados, desaparecidos (pequeña diferencia), entre otras prácticas que implementaba el ejército y la entonces Dirección Federal de Seguridad, encabezada por Miguel Nazar Haro (asesino por naturaleza y cruel por educación).

Es necesario apuntar que el movimiento de estudiantes de 1968 y de 1971 fue solo una parte de todo el movimiento que se centró en contra de las acciones del gobierno y la desigualdad social y económica en México y la represión que los estudiantes sufrieron también fue una de tantas que el gobierno realizó en contra de miles de personas durante ése periódo. No quiero hacer ver a los muertos y desaparecidos de la guerra sucia como mártires inocentes y abnegados, es justo reconocer que aunque sus intenciones pudieron ser buenas, sus medios fueron muchas veces los incorrectos y quebrantaron la ley, por lo que deberían de haber sido juzgados conforme a derecho y en su caso, condenados a la pena que la misma ley señala. Pero no, el gobierno tan floklórico que tenía el país en aquel tiempo pensó diferente (éstos weyes del PRI siempre piensan diferente) y basados en el precepto filosófico tan comentado y eficaz que masomenos dice así: "muerto el perro se acabó la rabia", se dedicaron a terminar con la vida de cualquier persona que fuera militante de algún grupo subversivo o estuviese relacionada en el más mínimo aspecto con algún militante. Luis Echeverría, Mario Moya Palencia, Miguel Nazar Haro no tienen que ser tratados con algo que no sea el de presuntos asesinos. Si México quiere vivir la reconciliación total es necesario que se encuentren los culpables de tantos y tan variados actos de tortura y asesinatos. Pero se tiene que trabajar en serio en el tema, no como el teatro que montó nuestro muppet baby número dos, Vicente Fox, el cual, lejos de buscar aclarar los crímenes del pasado, utilizó dichas muertes para llevar agua a su molino político. Chale mis amigos, que tristeza (ya me enojé)...se puede decir que "Chente el demente" se burló de los jóvenes que dieron su vida persiguiendo un ideal, el cual era bueno y noble. De cierto modo ésos jóvenes de los que ahora se burla Fox cooperaron en gran medida para el cambio político del país y por ende a la victoria del presidente mas cómico de nuestra historia. Ojalá que en la noche le jalen las patas con todo y botas, a ver si así se acomoda nuestro "paladín de la justicia".

Ayer me dieron ganas de salir a las calles junto con los miembros de la APPO y los maestros disidentes a gritar como loco "10 de Junio no se olvida" "2 de octubre es una herida" (si no rima no convence), o consignas del tipo, en contra del gobierno y las instituciones. Claro, lo tenía que hacer en pelotas, según las últimas tendencias de la moda en manifestaciones, si no se hace en pelotas no es inn y la manifestación carecerá de bases naturales. Realmente yo no olvido ni el 10 de junio ni el 2 de octubre por la simple razón de que no puedo olvidar lo que no viví, yo no tengo compañeros caídos ni desaparecidos, por eso no salgo a las calles a reclamar algo que no me corresponde. Confieso que estoy en contra totalmente de que la gente actúe por instrucción y no por convicción y conocimiento de causa; en consecuencia de mi pensamiento estoy totalmente en contra de que cada 2 de octubre salgan a hacer desmanes jóvenes con playeras del Subcomandante Marcos (otro muppet baby de la historia de México) y del "Che" Guevara mientras gritan que el dos de octubre no se olvida... chale, me cae que si les preguntamos las bases del movimiento estudiantil del 68 y en general del movimiento de ésa epoca no sabrían responder, por el contrario, me darían unos puñetazos acusándome de capitalista, represor, hijo de Bush y la Tigresa, engendro del PRI y nieto de Luis Echeverría.

Creo que es hora de que "desmitifiquemos" a los movimientos estudiantiles, a los cuales, yo los veo como algo que en su momento fue necesario ya que el gobierno era impune y represor, logró demostrar que el pueblo no está dormido y que hay capacidad de organización en caso de así merecerlo. Es justo que las personas agraviadas por los actos del gobierno reclamen justicia y es muy válido que las personas identificadas con ellos les apoyen, pero debe de haber un compromiso real porque lo que pasó no fue un juego, murieron personas. Yo pienso que para rendir un homenaje, los que quieran rendirlo, es trabajando por un país mejor, no andar haciendo desmadritos por la ciudad que son en perjuicio de nosotros mismos. Es cierto, es importante no olvidar, pero no olvidar para que nunca más tengamos gobiernos represores y corruptos. El no olvidar que se basa en desmanes en manifestaciones ya no se usa, ya no es inn, que lo entiendan los grupos que atentan contra la paz y estabilidad social del país, que lo entienda la APPO (que no han de leer esto porque pa acabarla de amolar, también son globalifóbicos) y todas las personas que detrás de una causa, la que sea, no importa, aprovechan para desatar su capacidad destructiva y que más allá de traerle un beneficio al país, lo perjudica cada día más.

Saludos y nos vemos mañana.

Pedro Yons