Lunes de Siete Maravillas....

Que tristeza, es lunes, aunque el lunes es un día para empezar, renovarse, sigue siendo un día triste, difícil, pero bueno, eventualmente se terminará y le dará cabida a que empiece el martes, día en el cual presentaré mi cortometraje, ya saben, a las 8:30 de la noche en casa libertad, en Guadalajara, Jalisco (ajúa), repito, están invitados y quien no pueda asistir nada más dígame y vemos la manera de que tenga una copia del primer trabajo que hemos logrado como productora, el cual espero sea el primero de muchos.

Regresando a la fatiga del lunes, para variar, el sol anda medio enfadoso, como en los últimos días, hoy no vi el pronóstico del clima pero se me hace que vamos a tener calor, de ese que no se quita ni usando sombrilla.

Hoy (ahora si para variar) creo que no voy a hablar de política ni nada de eso (nótese el creo), hoy voy a dar mi opinión y creo fielmente que mis dos lectores me van a mentar la madre al unísono y me van a decir que le doy patadas al pesebre, que no quiero a mi país, que no valoro, que soy un malinchista, hijo de bush, capitalista, anoréxico, bulímico, reguetonero y demás adjetivos que estarán cerca de apachurrarme el corazón hasta hacerme llorar del dolor y arrepentirme de lo que voy a decir.

El tema que hoy comparto con ustedes es el de las siete nuevas maravillas, en particular la maravilla de Chichen Itzá. Desde que arrancó la convocatoria para que todo el mundo votara aquí en México se armó una difusión muy interesante sobre el tema, cosa que no se veía hace mucho en algo no político, lo cual es bueno. No miento (que raro) cuando digo que diario me llega un correo invitándome a votar por Chichen Itzá bajo varias premisas; me ha llamado mucho la atención que las más recurrentes son las de: - vota para que el mundo conozca nuestra maravilla, para que se le de el lugar que merece, no es posible que la estatua de la libertad vaya a ser maravilla y Chichen Itzá no - y demás enunciados que ya ustedes deben de conocer mejor que yo.

Primeramente hablo por muchos de nosotros (mexicanos) cuando digo que al enterarnos de que Chichen Itzá estaba nominado nos dolió el cuello de tanto orgullo y pensamos - aquí sin nos hacen los mandados todos - al fin y al cabo no hay que tirar penales para ganar, todo era cuestión de meternos a internet o mandar un mensajito (pa eso los mexicanos nos pintamos solos, no sabemos leer pero eso de la teconología lo dominamos de pe a pa) y listo. Aquí es cuando mi opinión se desvía de la opinión general, no creo equivocarme cuando digo que la mayoría de los mexicanos votamos con el fin de que Chichen Itzá estuviera en los planos internacionales y todos los europeos dijeran -wow, que maravilla hay en México-; otros tantos votaron con el fin de que la estatua de la libertad se joda (me cae que ningún mexicano ha votado por la estatua de la libertad), para saber que se siente ganarle a los gringos en algo, ahora es cuando. Desgraciadamente creo no equivocarme (rara cosa) cuando digo que la mayoría de los que están votando por Chichen Itzá no saben bien a bien que onda con dicha maravilla, el caso es quedar chido ante el mundo, lo cual también es válido, una alegría entre un mar de sinsabores que la historia nos ha dado (incluido Miguel Hidalgo) no nos viene nada mal. Aquí el caso es que ya que andamos entrados, pues no nos cuesta nada informarnos sobre nuestra maravilla para saber más de aquella cultura tan impresionante. También es importante resaltar que si queremos quedar bien ante el mundo hay que cambiar otras cosas mas importantes, cosas que realmente importan, no ponernos a darle importancia a Chichen Itzá, esas cosas pasan a segundo plano en un país que no se puede dar el lujo de perder el tiempo compitiendo contra otras maravillas. Hay que competir en otros ámbitos, los que realmente pueden cambiarnos y hacernos mejores. Espero que no se malentienda lo que digo, total, a mi me vale sorbete si Chichen Itzá queda o no dentro de las siete nuevas maravillas porque soy conciente de que maravilla es desde que se construyó y no dejará de serlo nunca (a menos que a los políticos se les ocurra hacer un reino aventura ahi), y para corroborar eso no necesitamos la aprobación de medio mundo ni mucho menos ganarle a los gringos, para mi Chichen Itzá es una de las tres maravillas del mundo, no importa si son nuevas, viejas, siete, seis o como sea, es de las tres mas chidas, y eso no está en tela de juicio, aunque nadie vote por ella, ni aunque la estatua de la libertad hablara.

Me despido recordando que un día como hoy pero de 1946 se fundó la compañía Sony con veinte empleados solamente.

Nos vemos mañana mis queridos y nunca olvidados lectores y no se preocupen, yo ya vote por Chichen Itzá, lo que nunca sabrán es si vote o no por la estatua de la libertad.

Pedro Yons