El bendito hueso...

Mis queridos lectores, un gusto saludarlos en mitad de semana, la ya muy mentada mitad de semana...Ayer la verdad no escribí porque no tenía ganas, no me animé, me dio penita, me cohibí, me sonrojé vaya. Hoy vencí la timidez y aquí estoy, listo para soltar una ronda de tonteras y desvaríos...y comenzaré con una encuesta: ¿quién quiere que hable sobre la elección interna del PRD? ¿nadie?...me vale...voy a tocar el tema levemente...

El dicho ése de que "la unión hace la fuerza" en México nos lo pasamos por donde el sol no llega...es un hecho. Somos un pueblo separado. La elección interna del PRD es una muestra clara de ello. Es impresionante que no se puedan poner de acuerdo entre ellos, unir fuerzas para tener un partido estable y firme que les permita trabajar en favor del país...¿se supone que son un mismo frente no?...trabajen como tal...los invito a disimular las ganas de hueso que tienen el rechoncho Encinas y el flaco Ortega. Por educación y buenos modales estaría bien que mis queridos cuates dejaran de ladrar y se pusieran a buscar soluciones. Por cierto, les aviso que una opción no es repetir la elección, ya estuvo bueno de andar gastando dinero del pueblo en cosas que no van, en sus pleitos y ambiciones políticas. Ya con el gobernador de Jalisco tenemos más que suficiente (hoy no hablaré mal de Emilio)...La elección interna del PRD es el claro ejemplo de que en lugar de avanzar en unión y concenso, vamos para atrás; ahora resulta que ni en los partidos políticos, donde se supone que se debe trabajar en conjunto, se puden poner de acuerdo entre gente con las mismas ideas y propuestas...¿no será que la única idea que predomina entre los políticos mexicanos es la de roer un hueso medio importantón? a mí se me hace que si...

Conclusión: los ideales, colores y tendencias en México valen quiote...el hueso es lo que importa...

Propuesta: para evitarnos conflictos en futuras elecciones de cualquier tipo propongo que en lugar de que las personas salgan a votar y elegir al candidato menos malo se realice un torneo de sillitas, ése en el que se pone una rola y se para, la persona que no alcance a sentarse estará fuera del juego y por ende perderá la oportunidad de adquirir un hueso...Con esto no espero tener mejores gobernantes, seguirán siendo los mismos aunque ahora ya sabremos que mínimo tienen el mérito de haber triunfado en el juego de las sillas, labor que implicó una estricta sincronía entre el oído, la vista y las nalgas...

Nota: no generalizo, aunque ud. no lo crea, hay políticos buenos, que son minoría...

Saludos y nos vemos mañana...

Pedro Yons...