Lunes de Niños...

Mi estimado par de amigos y lectores, les saludo en este inicio de semana la cual se vislumbra muy buena, entre otras cosas porque al parecer ya terminaremos el primer corto del proyecto que inicié en enero pasado, por ende les quiero hacer extensa la invitación al estreno del mismo, mi ópera prima (que chido se ve eso de ópera prima) como productor y escritor de cortos. La presentación del corto se llevará a cabo el día 8 de mayo a las 9 de la noche en el Hostal Casa Libertad, en próximos días estaré envíando la unicación del lugar. Ahí los estaré esperando, a mis dos lectores y a los amigos de ellos, que también son mis amigos (por eso de que les de pena ir).

Hoy como todos ustedes deben de saber se celebra el día del niño lo cual me da gusto, hay que celebrarlos, quererlos, cuidarlos, enseñarlos (no al estilo Michael Jakson) y tratar de encaminarlos bien ya que, aunque se escuche trillado y huela a cliché es necesario repetir y repetir y repetir que los niños son el futuro de México (a excepción de Chabelo claro).

Por día del niño me imagino una escuela en la que hoy no hay clases, los niños asisten y hay fiesta, la típica kermesse, pastel para todos, juegos para todos, premios y sorpresas para todos, no puede faltar la cárcel y el registro civil, para que los niños jueguen a ser mayores (necesito que me digan a dónde podemos ir los mayores para jugar a ser niños). Si el presupuesto de la escuela o la cuota de los padres lo permiten puede que haya un show con un mago que también es ventrílocuo, si no lo permite habrá una piñata por grado o de plano pastel o de plano nada, pero no deja de ser día del niño.

Es importante que no nos olvidemos que el día del niño incluye a todos los niños del país (cuando digo todos me refiero a los treinta y un millones de infantes que conforman la niñez de México), desde el hijo de Luismi hasta el hijo de Juanita la vecina de mi abuela (un saludo a mi abuelita, aprovecho la ocasión y también a todos mis sobrinos, primos, amiguitos, etc que celebran hoy su día). Quiero hacer notar que dentro de los treinta y un millones de niños se encuentran los de la calle, a los que son pocas las personas que tienen en cuenta, para éste día y para todos los demás (que dijeron, éste ya se puso dramático, pues claro, ¿qué esperaban? ¿qué me pusiera a redactar la infancia de los famosos y la historia sobre el cerotín bañado en plata de la hija de Tom Cruise?), se encuentran los niños maltratados y para los cuales hoy será un día más, yo creo que ellos ya no distinguen si es lunes o martes, si es día del niño o día del amor y la amistad (mucho menos si es día del taco). Hago esta reflexión porque sería bueno que nos quitáramos la indiferencia, la falta de compasión hacia el prójimo, desgraciadamente cada día perdemos un poco más la capacidad de que nos duelaa el dolor ajeno. No digo esto con afán de que salgamos a las calles a adoptar niños, a comprarles todo lo que vendan o a darles todo lo que pidan, aquí se trata de tomar conciencia y ayudar en lo que podamos, si nuestras posibilidades permiten solamente decirle a un niño de algún crucero feliz día del niño, pues hacerlo de todo corazón (aunque suene cursi y un poco a Gaby Vargas). El que haya niños de la calle es un tema que compete en su mayoría a los gobiernos que han arrojado a tantos niños a los cruceros, a las miles de mentes retorcidas y dementes que explotan a dichos niños y los obligan trabajar de sol a sol, a los padres irresponsables y también dementes que dan prioridad a vicios y demás cosas por encima de sus hijos y a la educación que el gobierno, a lo largo de la historia moderna de México ha otorgado a sus gobernados, es decir, nosotros (si leen esto Felipillo, Chente, Charlie, Neto y demás exgobernantes no se lo tomen personal, en especial tú mi querido Echeverría). Yo me imagino que a los sesenta millones de pobres que tenemos en México, dentro de los que se encuentran muchos millones de niños, los gobernantes los ven como "carne de cañón", en especial a los niños. Hoy que celebramos el día del niño me viene a la mente aquel desayuno de Fox días después de tomar posesión como el mero mero del sistema político mexicano (no digo presidente porque es un término muy grande para las acciones realizadas por nuestro paladín de la democracia) se aventó un desayuno con varios niños de la calle en el cual dijo que hasta aquí con esa vida para los niños, prometió acabar con los niños de los cruceros, darles educación, darles bienestar, que nuestra responsabilidad social lo exígía (chale, me acuerdo de ese discurso y neta que me dan ganas de llorar de la emoción), total, una demagogia tremenda que realmente me hizo pensar en que su parecido con Don Quijote no era obra de la casualidad. El caso mis queridos lectores, para no hacerla más cardiaca es que a la fecha, aquellos niños que Fox iba a proteger (creo que eran seis) ahora han corrido con una suerte que ni se imaginan, creo que uno ya murió, creo que tres están en el bote (cárcel para los que no me entendieron) y los que sobran siguen en las calles y no precisamente en sus coches. Para mi esa imagen resume las acciones que tomó Fox en su sexenio en contra de la niñez callejera, es decir, nada, nothing, nanais, niente, solamente lucrar con las imágenes, utilizar la miseria de los demás para atraer votos y simpatías lo cual se me hace lo mas bajo (por debajo de lo que le hizo Niurka a Juan Osorio). Pero bueno, eso ya pasó y como los mexicanos no tenemos memoria ya se olvidó, ahora a esperar a ver que hace Felipillo por esos seres tan utilizados por malas personas (ogetes para ser preciso). Tengo una fe tremenda (no me queda de otra, la esperanza es lo último que muere) en que haga algo más que todos sus antecesores (y eso que no soy panista).

Bueno, me despido esperando que todos los niños pasen un buen día, aunque para ser sincero preferiría que pasaran un mejor futuro (si se pueden las dos cosas pues que mejor). Bueno, un abrazo para ellos y una proposición para nosotros, los mayores, vamos haciendo de éste un mundo mejor y para eso hay que tomar cosas de los niños (repito, no al estilo Michael Jackson) ya que, si nos acordamos un poco, también fuimos niños y teníamos unas ideas de pocamadre, de ésas que en cinco minutos terminan una guerra, claro, ahora no aplican no porque sea diferente, no aplican porque conforme uno crece se va llenando de envidias y conductas que definitivamente no deberían de existir y las cuales hacen más dificil la vida (los gobernantes del mundo son especialistas en eso), en pocas palabras nos complicamos la vida de una manera ejemplar (por eso los marcianos no quieren hacer un tratado comercial con nosotros) que en lugar de buscar avanzar buscamos que los demás no avancen, aunque nosotros tampoco avancemos. Creo que sería mejor si todos nos echamos la mano, de menos para dar un sape cuando veamos que nuestro compañero está haciendo las cosas mal (lo del sape es metáfora, no se vayan a agarrar a sapes y luego digan que ahi ando de amarra navajas).

Saludos a Jorgito, Daniela, a la RIN, Regina, Andrea, Paula, Sofia, Adriana, Santiago, José, Renata, Mariana, Alberto, Micho, Liliana, Diego, Valentina, Iñaki, Esteban, Ximena, Ana Paula, Alejandra, Fátima y a los no tan niños (Pablo y Alvaro), en general a todos los niños de México, para los cuales, espero que cambiemos próximamente, para poder dejarles un lugar en el que se pueda vivir normalmente, lo cual, ya sería ganancia.

Pedro Yons